martes, 25 de marzo de 2014

La Magia...


La Magia


La magia es eso que nos tiene sin pestañear, que engaña nuestros sentidos, es lo que hacen los ilusionistas.

Definición de ilusionismo;

"Es un arte escénico, subjetivo, narrativo y espectáculo de habilidad e ingenio, que consiste en producir artificialmente efectos en apariencia maravillosos e inexplicables, mientras se desconoce la causa que los produce. Estos efectos que fingidamente hacen parecer realidad lo imposible, se conocen como efectos, juegos de magia, ilusiones y vulgarmente como trucos de magia."

Yo lo comparo con el amor, con esa magia que se produce cuando dos personas se atraen y comparten emociones, sentimientos, sexo, etc... Eso produce efectos que pueden hacer parecer realidad lo imposible. Es decir, la magia del amor nos impide ver en ocasiones incompatibilidades, formas de pensar contrapuestas, diferentes formas de abordar la vida, que conducen inevitablemente a separar caminos.


Y es lo que sucede cuando desaparece la magia, cuando conocemos el truco, cuando podemos ver a través de esos efectos artificiales. Y entonces la ilusión se desvanece, se cae el velo que nos mantenía sin pestañear, que engañaba nuestros sentidos y nos chocamos con la realidad.

Pero que sería del mundo sin creer en la magia, sin sentirnos ilusionados, sin vivir de vez en cuando esos momentos. Todo sería mas serio, mas racional. La vida sería mas sosa, mas predecible, en definitiva, una vida sin magia es una vida mas aburrida.

Y he pensado que tal vez la magia en el amor es eso, enamorarse, quererse, desilusionarse y volver a empezar. 

Para mi la magia consiste en seguir buscando magos o ilusionistas cada vez mejores, que nos atrapen, que nos mantengan sin pestañear, y a los que nunca les pillemos el truco.


miércoles, 5 de marzo de 2014

Cuando me acerco...




Cuando me acerco...


A veces pienso que somos como dos imanes que a menudo se juntan por el mismo polo. Me acerco, y a medida que me aproximo, tu te vas alejando, en un recorrido interminable en el que en un determinado momento creo empezar a estar mas allá de mis límites.... Y decido retroceder poco a poco, intentando llegar a sitios conocidos, a lugares que me resulten familiares....,  y justo en ese momento, tu giras 180 grados y mi carga positiva atrae irremediablemente tu carga negativa y te acercas a mi.

Me sigues en ese retroceso, sin dudas, sin miedos. Y empiezo a sentirme yo mismo de nuevo, recupero la seguridad en mi, y de nuevo empiezo a darme, porque es lo que quiero, es lo que me nace, de corazón, confiado. 



Pero inevitablemente cuando empiezo a darme a ti, empiezas a retroceder. Tu imán vuelve a girar 180 grados y mi carga positiva está frente a tu carga positiva, y de nuevo a cada paso que doy, tu retrocedes, como ese campo magnético, invisible, pero como una barrera infranqueable. 

Automáticamente un avance de mi imán es seguido de tu imán que se aleja, en una danza continua y aparentemente sin fin. Una danza, en la que no sé en que momento, pierdo el compás.

Pero cuando soy consciente de que ya no bailo, cuando reparo en que solo me contorsiono, me dirijo a mi silla...tímidamente, con recato... y me siento.

Y  justo cuando no he hecho nada mas que sentarme, apareces de nuevo invitándome a bailar, y por la razón que sea, soy incapaz de decirte que no, que esperes a la próxima canción, a la próxima fiesta. Simplemente te sonrío, me levanto, y cojo tu mano mientras te acompaño de nuevo a la pista.